julio 3, 2024

Conecta con nosotros

#Si Sostenido

Javier Corral, el opositor del PAN de Ricardo Anaya

Publicado hace

el

“El Pacto por México le quitó al PAN la capacidad de ser oposición”

Por: Luis Moreno Flores

El Partido Acción Nacional (PAN) vive una severa crisis de identidad: ha dejado de ser oposición, pues sus senadores y diputados votaron a favor de todas las reformas propuestas por el presidente Enrique Peña Nieto, pero, al mismo tiempo, perdió posiciones en el servicio público, a tal grado que su presente recuerda al pasado en el que solo podía esperar tundas en las urnas propinadas por su antagonista tricolor.

A finales de este año, el blanquiazul renovará su dirigencia nacional y en su interior existen voces encontradas respecto al tipo de líder que necesita para abandonar la modorra en la que ha caído. Por un lado, el grupo de Gustavo Madero afirma que no es momento para competencias, sino de unión y postulan a Ricardo Anaya.

La llegada de Anaya, hasta hace una semana, parecía inevitable, sin embargo, dos nuevo competidores surgieron: Juan José Rodríguez Prats y el senador Javier Corral. El segundo fue uno de los principales detractores de la reforma en telecomunicaciones. Corral hizo un espacio en su agenda para conversar en exclusiva con La Orquesta sobre temas como la elección en San Luis Potosí, la colusión de dirigentes panistas con gobernadores priistas corruptos, candidaturas independientes, entre otros.

 

La Orquesta: ¿Qué diferencias existen entre usted y Ricardo Anaya que pudieran inclinar la elección en su favor?

Javier Corral: Puedo asegurar mejores condiciones de equidad en la contienda interna porque no pertenezco a grupos, no estoy dentro de la dinámica de facciones. Puedo  hacer que el PAN recupere su causa democrática, México necesita a Acción Nacional fiel a su origen.

 

LO: Usted fue uno de los principales detractores de reformas presidenciales y el Pacto por México, de resultar electo dirigente ¿podríamos esperar un cambio radical en la postura de los diputados y senadores del PAN?

JC: Yo no me opuse a todas las reformas del Pacto. Voté en contra de algunas, principalmente contra la de telecomunicaciones, la energética, y sobre todo me negué a aceptar la parte secundaria de las reformas. El PRI traicionó lo que originalmente se había acordado y lo volvió a hacer con el paquete de reformas más presidencialistas de la historia de México. Le dejó, prácticamente, todo el control a Peña Nieto, a quien le dimos un voto de confianza, pero ante los actos de corrupción de él y sus funcionarios cercanos, que asemejan a lo peor del viejo PRI, nos dejó embarrados y sin el reconocimiento de las aportaciones del PAN a la reforma, por lo que claro que buscaría, desde mi puesto como dirigente, garantizar que el partido sea un contrapeso político, que actúe en oposición cuando así se requiera.

 

LO: ¿El Pacto por México debilitó al PAN?

JC: Nos quitó la capacidad de ser una fuerza de oposición. Debemos romper el acuerpamiento que existe entre el presidente Peña Nieto y el PAN.

 

LO: En su video de presentación usted había comentado que en niveles locales existe una colusión entre gobernadores corruptos y los dirigentes del PAN…

JC: Es verdad. En buena parte del país existe un contubernio entre los directivos estatales del PAN y gobernadores corruptos emanados del PRI. Estoy consciente de que esta relación ha permitido que los propios gobernadores se sirvan del PAN para diversos objetivos.

 

LO: Para el caso de San Luis Potosí, ¿diría que Héctor Mendizábal, próximo a ser diputado local y posiblemente líder de la bancada, está en sintonía con Fernando Toranzo y su grupo? 

JC: No quisiera hablar de casos específicos, porque tengo que presentar pruebas de esto, pero estamos enterados que este matrimonio entre dirigentes del panistas y priistas existe, no puedo decir que en San Luis Potosí, pero a nivel nacional existe.

 

LO: ¿El hecho de que el PAN haya perdido por segunda ocasión un bastión como el estado de San Luis Potosí es resultado del mal actuar de la directiva de Gustavo Madero y Héctor Mendizábal?

JC: Puedo decir que Sonia Mendoza realizó una campaña extraordinaria. Comenzó con 20 puntos por debajo de Juan Manuel Carreras y gracias a sus esfuerzos, incluso oponiéndose a los designación del grupo de Madero, logró emparejar la contienda, sin embargo, las artimañas ejecutadas por el PRI impidieron que existiera un proceso justo. Estoy cierto que si hubiera habido una campaña apegada a la legalidad, es muy probable que hoy Sonia sería la gobernadora electa de San Luis Potosí.

 

LO: Eso en el caso de la elección de gobernador, pero ¿qué le ocurrió al PAN en la capital potosina, donde Xavier Azuara al inicio era un claro favorito y al final perdió de forma estrepitosa (2 a 1) y no ante el PRI, sino contra el PRD en la figura de Ricardo Gallardo Juárez?

JC: De ese tema no estoy del todo enterado, puesto que es difícil conocer las situaciones específicas de cada uno de los municipios del país. A nivel nacional creo que existe una reconfiguración de cómo vota el electorado, tenemos el caso del estado de Nuevo León que quedó hecho un verdadero rompecabezas de partidos. Tanto alcaldías y diputaciones marcaron resultados muy diferentes, incluso se presentó el fenómeno que un candidato independiente como gobernador.

 

LO: Algunos politólogos aseguran que la única forma para que el PAN gane la presidencia en 2018 sería con un candidato independiente. ¿Hay posibilidades de que esto ocurra?

JC: Dentro del partido existen perfiles capacitados para afrontar el reto de ganar la elección presidencial, no obstante, la posibilidad de postular a un externo no puede ser descartada. Ya en el pasado otras personas, sin un filiación política, han visto en el PAN un instrumento para cumplir con una convicción moral e ideológica de servir al país. Encuentro muy factible que alguien externo pueda encabezar nuestro proyecto.

 

LO: Aún faltan 3 años para la elección y ya hay algunos candidatos apuntados, incluida un perfil femenino por el PAN. ¿Cuál es su opinión sobre el destape de Margarita Zavala?

JC: Ella ha revelado con mucha anticipación sus deseos de competir, esto evidentemente la coloca como el blanco de las críticas. Es una persona preparada, capaz, que sin duda puede representar al partido. Ahora lo importante es recuperar la presidencia para reencaminar al país y sacarlo de esta momento de crisis en el que se encuentra, resultado de la administración corrupta del PRI.

 

LO: ¿Una alternancia nueva, con el PRD o Morena le vendría bien a México?

JC: Por supuesto que no. Se trata de hacer un cambio real, con un sustento ideológico, con un verdadero proyecto, el cual el PAN puede lograr.

 

LO: Hay quien apunta a que de ganar Ricardo Anaya la presidencia del partido, elegiría Sonia Mendoza como secretaria general…

JC: No tengo información de cómo pretende integrar su planilla Ricardo.

 

LO: ¿Usted ya tiene pensada la suya? ¿Algún compañero senador podría acompañarlo?

JC: Ahora no puedo decirlo, pero en estos días lo daremos a conocer.

Total Page Visits: 148 - Today Page Visits: 1

#Si Sostenido

Cómo calificar un altar de muertos | Columna de León García Lam

Publicado hace

el

Por

VOLUTA IX.

La antropología (eso piensa una buena parte de la población) es una ciencia sin gran aplicación práctica. Sirve, entre otras muy pocas cosas, para determinar al ganador del concurso de altar de muertos que se organiza cada año en cada escuela de México. En mi flaco currículum, durante mis pininos profesionales se amontonan los reconocimientos que dicen más o menos así:

La escuela Bomberos Heroicos perteneciente al SEER otorga el presente reconocimiento al Mtro. (en ese mundo todos somos maestros) León García Lama por su valiosa participación como jurado en el TRADICIONAL CONCURSO DEL ALTAR DE MUERTOS “INNOVANDO NUESTRAS TRADICIONES”. Luego viene un lema como “El saber se forja con el conocimiento de cada día”, a 31 de octubre de (cualquier año entre 1997 y el 2012). Firman: autoridades escolares.

Por esa razón, estimadas y estimados tres lectores de la Voluta, les lego la sabiduría que se adquiere al ser jurado, año tras año, de la verdadera tradición de México que no es poner un altar, sino el concurso “para que no se pierdan las tradiciones”.

Bueno, no lo haré, sino hasta el próximo año (si es que) porque en este 2020, no se realizará ningún concurso “tradicional”, aunque paradójicamente es el año con más muertos que hemos tenido en la historia de México: 40,863 muertos por violencia; 139 153 por causas asociadas al COVID más los muertitos de causas “normales” dan la escalofriante y huesuda cifra de 193 170 muertes, dicho conservadoramente por las instituciones oficiales (CENAPRECE).

 

Cómo poner un altar de muertos

Lo más importante ya lo tenemos: los muertitos. Lo segundo más importante también: el hambre de tamales. Ponga una mesa y una caja pegados a la pared, simulando una pirámide de tres pisos que es una representación del mundo. ¿El mundo tiene tres pisos? Sí y trate de no hacer preguntas. Un altar digno presume dos características: cuida la simetría y está organizado en montones de 2, 3 y 4 cosas ¿por qué? Pues ya le dije: no haga preguntas. Usted ponga en las esquinas 3 naranjas, en un platito 4 tamales y otros tantos plátanos de alfeñique, 2 panes de muerto en cada lado de su altar. La lógica obedece así: si usted fuera muerto ¿qué necesitaría? Un chocolate, unos cigarritos (allá en el mundo de los muertos todos fuman, incluso los que murieron de enfisema), una cervecita, un camote, un dulce de chilacayote. La imagen es etérea como los recuerdos, una fotografía ayuda, no al difunto a reconocerse, sino a saber que las ofrendas son para él o para ella y que puede invitar a sus compitas. Se sabe de diálogos así:

–¿A ti qué te pusieron, tú?

–Unas guayabas, un vaso sin nada, otro con tierra, otro con agua y una veladora (quesque los cuatro elementos), un puño de sal y un caminito de cempasúchil.

–No, pus te fue bien, a mí no me pusieron nada, pero la chaviza se andaba pintando la cara como osos panda, que porque “es la tradición”.

–Acá pusieron tamalitos, taquitos de pastor, atole, cafecito, frutas y dulces.

–¿Dónde dónde?

 

La poesía

Nocturno en que habla la muerte

Xavier Villaurrutia

 

Si la muerte hubiera venido aquí, conmigo, a New Haven,

escondida en un hueco de mi ropa en la maleta,

en el bolsillo de uno de mis trajes,

entre las páginas de un libro

como la señal que ya no me recuerda nada;

si mi muerte particular estuviera esperando

una fecha, un instante que sólo ella conoce

para decirme: “Aquí estoy.

Te he seguido como la sombra

que no es posible dejar así nomás en casa;

como un poco de aire cálido e invisible

mezclado al aire duro y frío que respiras;

como el recuerdo de lo que más quieres;

como el olvido, sí, como el olvido

que has dejado caer sobre las cosas

que no quisieras recordar ahora.

Y es inútil que vuelvas la cabeza en mi busca:

estoy tan cerca que no puedes verme,

estoy fuera de ti y a un tiempo dentro.

Nada es el mar que como un dios quisiste

poner entre los dos;

nada es la tierra que los hombres miden

y por la que matan y mueren;

ni el sueño en que quisieras creer que vives

sin mí, cuando yo misma lo dibujo y lo borro;

ni los días que cuentas

una vez y otra vez a todas horas,

ni las horas que matas con orgullo

sin pensar que renacen fuera de ti.

Nada son estas cosas ni los innumerables

lazos que me tendiste,

ni las infantiles argucias con que has querido dejarme

engañada, olvidada.

Aquí estoy, ¿no me sientes?

Abre los ojos; ciérralos, si quieres.”

 

Y me pregunto ahora,

si nadie entró en la pieza contigua,

¿quién cerró cautelosamente la puerta?

¿Qué misteriosa fuerza de gravedad

hizo caer la hoja de papel que estaba en la mesa?

¿Por qué se instala aquí, de pronto, y sin que yo la invite,

la voz de una mujer que habla en la calle?

 

Y al oprimir la pluma,

algo como la sangre late y circula en ella,

y siento que las letras desiguales

que escribo ahora,

más pequeñas, más trémulas, más débiles,

ya no son de mi mano solamente.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Encontrar las llaves | Columna de León García Lam

Total Page Visits: 148 - Today Page Visits: 1
Continuar leyendo

#Si Sostenido

LA ALEGRIA | Columna de Juan Jesús Priego

Publicado hace

el

LETRAS minúsculas.

«¿Sabes, Hump? –confiesa el héroe de una de las novelas de Gilbert K. Chesterton, el gran polemista inglés-, los hombres modernos tienen una idea muy equivocada de la vida. Parece que esperan de la naturaleza lo que ésta nunca ha prometido darles y, mientras tanto, destruyen todo aquello que en realidad les da.
En las iglesias ateas de Ivywood todos hablan de paz perfecta, de confianza sin límites, de alegría absoluta y de corazones que laten por todos, pero no por ello tienen un aspecto más alegre que los demás… Yo no sé si Dios entienda por felicidad el gozo que todo lo comprende y todo lo supera, pero Dios quiere que cada hombre tenga su alegría, y yo tengo toda la intención de no dejármela robar».

Para ser sincero, yo también he escuchado muchos discursos como el de las iglesias ateas de Ivywood, y no precisamente en las iglesias ateas de Ivywood; también yo he oído cientos de sermones que hablan de paz perfecta, de confianza sin límites, de corazones que laten por todos, y acaso no sólo los haya oído, sino tal vez incluso pronunciado. Lo que no sé es si modificando el texto de Chesterton y escribiendo «parroquias cristianas» allí donde él sólo dijo «iglesias ateas» cambiarían mucho las cosas.

Los cristianos hablamos de resurrección, de vida perdurable, de providencia o cuidado de Dios, de amor sin límites, pero no por eso vivimos más contentos. Todo parece indicar que los creyentes nos tomamos bien poco en serio lo que nos dicen nuestro pastores en sus –a menudo largos y muy aburridos- sermones. Sí, hemos de confesarlo bajando la cabeza: en nuestras iglesias, las homilías son saetas que esquivamos lo mejor que podemos… Cuenta Julien Green en un librito suyo titulado Liberté que hubo en París no hace mucho tiempo una dama de la alta sociedad que cada vez que iba a Misa advertía con severidad a su sirvienta: «Si el señor cura predica sobre la fe o sobre el perdón de los pecados, me dejas dormir; pero si habla de María Magdalena, me despiertas». Ella, como quiera que sea, iba a la iglesia únicamente a cumplir, y, por supuesto, a dormirse.

«Voy a definirle lo contrario de un pueblo cristiano –dice el párroco de Torcy en esa gran novela de Georges Bernanos que es su Diario de un cura rural-: lo contrario de un pueblo cristiano es un pueblo triste, un pueblo de viejos. Acaso me objete usted que la definición tiene muy poco de teológica, pero basta para hacer reflexionar a los caballeros que bostezan los domingos en Misa. ¡Claro que bostezan! No querrá que en media hora semanal, la Iglesia pueda enseñarles la alegría. E incluso si se supieran de memoria el Catecismo de Trento, no estarían probablemente más alegres».

Y sí, la verdad es que la fe debería tener el poder de hacernos más alegres, más sonrientes, menos hoscos. Un cristiano no debería atreverse a salir a la calle si antes no ve reflejado en el espejo un rostro resucitado.

Cuando, hace ya muchos años, leí por primera vez La farisea de François Mauriac, cómo se me quedó grabado lo que dijo uno de los personajes al referirse a una antipática señora que andaba por allí cerca y que se las daba de muy católica: «Lo que voy a decir puede asustarte, pero pienso que es mejor ser una bestia inmunda que tener la clase de virtud de Brigitte Pian». ¡Dios mío, qué frase más dura! Y; sin embargo, es preciso reconocerlo: sí, hay en este mundo gente muy católica, lo que se dice muy católica, pero al mismo tiempo muy insoportable y muy antipática. ¿Por qué se avergüenzan de mostrar un rostro atractivo y jovial? ¿Qué se lo impide?

A estas personas habría que recordarles lo que escribió una vez Andrew M. Greeley en uno de sus libros: «Las personas que creen en la resurrección deben ser gente alegre, y los cristianos católicos que tienen una visión relativamente más benigna de su naturaleza que nuestros hermanos separados, tienen que ser una congregación de gente más alegre, más jovial y más bromista. Todo lo que tengan de graves, de ásperos, de severos lo tienen de fallo como católicos… La Iglesia necesita hombres que tengan visión. Necesita hombres jubilosos, alegres y de corazón fuerte que caigan en la cuenta de que, a pesar de lo desesperada que pueda ser la situación, nunca se la debe permitir que se ponga seria; y aunque puedan extinguirse las luces, siempre hay esperanza de que vuelvan a encenderse». La excesiva severidad no siempre es signo de seriedad; a menudo es más bien muestra de una soberana estupidez.

San Pablo, poco antes de poner punto final a la carta que dirigió a los filipenses, les amonesta así: «Como cristianos, estén siempre alegres: se lo repito, estén alegres. Que todo el mundo note lo comprensivos que son. El Señor está cerca, no se angustien por nada» (4, 4). ¿Por qué esta insistencia del apóstol en cosas tan aparentemente secundarias como la alegría? ¿Por qué les dice una y otra vez que estén alegres? ¡Ah, bien sabía él lo propensos que somos los cristianos a dejarnos llevar por la tristeza y a andar por las calles de la vida mostrando un rostro de amargura!

¿Ha leído usted una famosa pieza teatral de Paul Claudel (1868-1955) titulada El padre humillado? Pues bien, en esta pieza hay una escena en la que el Papa envía este mensaje a Oriano de Homodannes: «Oriano, hijo mío, haz comprender a los hombres que no tienen otra cosa que hacer en el mundo que estar alegres. Hazles entender que la alegría que nosotros conocemos y estamos encargados de transmitir no es una palabra vaga o un insípido lugar común de sacristía, sino una noble, deslumbrante, íntima y profunda realidad, en cuya comparación lo demás no vale nada. Esta alegría es algo humilde, material, atrayente, como el pan que se apetece, como el vino que nos parece bueno, como el agua que nos hace morir cuando no nos la dan, como el fuego que quema, como la voz que resucita…».

¡Ah, sería necesario que el Papa nos enviase una carta en la que nos hablara largamente sobre la conveniencia de la alegría! No sé, tal vez sólo entonces nos la tomaríamos un poquito más en serio…

También te puede interesar: Niños a la carta | Columna de Juan Jesús Priego

Total Page Visits: 148 - Today Page Visits: 1
Continuar leyendo

#Si Sostenido

Un cohete potosino para el padre de un robot pianista | J.R. Martínez/ Dr. Flash

Publicado hace

el

Por

EL CRONOPIO.

El 14 de marzo de este dramático dos mil veinte, en pleno inicio de la crisis del coronavirus en San Luis Potosí, se lanzaba después de cuarenta y ocho años, un cohete en Cabo Tuna. El municipio de Charcas sería el testigo de esta histórica fecha, pues el cohete de combustible sólido Fénix 2, es uno de nueva generación que recupera el proceso histórico en el diseño de cohetes en el país y en especial en nuestro estado.

El cohete fue desarrollado por el Instituto Mexicano del Espacio Ultraterrestre y el Instituto de Física de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, con ello Cabo Tuna vuelve a marcar hitos en la historia de la ciencia y tecnología mexicana.

El programa Cabo Tuna inició en 1957 en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, con el lanzamiento del primer cohete diseñado y construido en México, el Física I, lanzado el 28 de diciembre de 1957. El programa tuvo un receso en 1972 y cuarenta y seis años después reinicia con el nuevo programa “Cabo Tuna, hacia un programa espacial mexicano”, impulsado por el Instituto de Física de la UASLP y el Instituto Mexicano del Espacio Ultraterrestre.

El cohete lanzado en Charcas lleva el nombre de Cohete Fénix I-2 “Alejandro Pedroza Meléndez”. Dedicado al Dr. Alejandro Pedroza Meléndez, por su contribución al desarrollo del área aeroespacial en México, así como a la tecnología mexicana.

Alejandro Pedroza Meléndez es un científico mexicano nacido en Villa de Arriaga, San Luis Potosí, se formó en el Instituto Politécnico Nacional y posteriormente ingresó como investigador en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla donde fundó el Laboratorio de Semiconductores, ahí, bajo su dirección, se construyeron una gran cantidad de dispositivos biomédicos y donde se desarrollaron las primeras celdas solares con calidad espacial en el país. Fundó además el Laboratorio de Microelectrónica, que fue un referente para el desarrollo de la microelectrónica en México; en dicho laboratorio se diseñó y construyó con tecnología nacional, la instrumentación necesaria para la fabricación de microcircuitos. Después se creó la sección de bioelectrónica para aplicarlos a instrumentos médicos.

A los microcircuitos fabricados en el Laboratorio se les dio una aplicación social inmediata en las primeras manos biónicas mexicanas, en los primeros estimuladores óseos mexicanos y en los primeros marcapasos mexicanos.

Alejandro Pedroza y su equipo desarrollaron los primeros microprocesadores en México, con los cuales fue construido el famoso Robot Pianista “Don Cuco el Guapo”, que en la década de los noventa visitó varias veces San Luis Potosí, ofreciendo conciertos en el Teatro de la Paz y en el teatro Carlos Amador, dentro de nuestros eventos de divulgación científica.

Fue director del programa de desarrollo del primer satélite experimental mexicano SATEX-I, donde participaron más de setenta investigadores de once instituciones de educación superior del país.

Alejandro ha recibido reconocimientos en su estado natal: Trayectoria de Éxito en el 2015 y Científicos Potosinos en 1994, en el marco del IV Congreso Nacional de Divulgación de la Ciencia que nos tocó organizar, aquí en San Luis Potosí.

Por toda esta labor en beneficio de la sociedad mexicana, por el camino de la ciencia y la tecnología, se le asignó su nombre al cohete Fénix que perturbara el apacible cielo del altiplano potosino hace siete meses.

 

Lee también: Un rugido en el desierto | Columna de J.R. Martínez/Dr. Flash

Total Page Visits: 148 - Today Page Visits: 1
Continuar leyendo

La Orquesta de Comunicaciones S.A. de C.V.
Miguel de Cervantes Saavedra 140
Col. Polanco
San Luis Potosí, S.L.P.
Teléfono 444 244 0971

Director Fundador
Jorge Francisco Saldaña Hernández

Director Administrativo
Luis Antonio Martínez Rivera

Director
Luis Alberto Moreno Flores

Opinión